Los delitos económicos en Alcobendas representan importantes desafíos para la seguridad y el bienestar económico. La sociedad española, con su floreciente actividad empresarial y financiera, no está exenta de esta problemática. Los delitos financieros comprenden una amplia variedad de actividades ilegales que afectan tanto a particulares como a empresas u organismos gubernamentales.
En nuestro despacho de abogados penalistas, se encontrará con un equipo multidisciplinario de profesionales especializados en derecho penal, con más de veinte años de experiencia. Le ofrecemos una asistencia completa para su caso, incluyendo la gestión y recolección de toda la documentación necesaria en su nombre, de manera que usted pueda despreocuparse totalmente de estos trámites.
Los delitos económicos o delitos contra el patrimonio están regulados por el Título XIII del Código Penal y tienen como misión salvaguardar el bienestar y el orden económico, independientemente de que sea el bien jurídico principal con protección penal o como un interés secundario. Lo que no significa, necesariamente, que sea un área independiente del Derecho Penal tradicional, sino que los delitos que abarca suelen estar vinculados a la actividad económica o societaria.
Aparte de los delitos económicos, existen otras formas similares dentro de este ámbito, como los delitos contra el patrimonio, que también pueden afectar a intereses económicos de naturaleza colectiva y que, igualmente, pueden cometerse en el ámbito empresarial. Ejemplos de estos incluyen fraudes o estafas, entre otros.
El ámbito del Derecho Penal Económico y Empresarial comprende una amplia gama de infracciones que pueden afectar a las organizaciones, tales como:
Claramente, existen numerosas acciones ilegales englobadas dentro de los delitos económicos, cada una con sus propias características y sanciones, lo que dificulta generalizar o mencionarlas todas de manera exhaustiva.
Sin embargo, se puede afirmar que las multas por delitos económicos más comunes oscilan entre seis y veinticuatro meses, mientras que las penas de prisión más severas pueden alcanzar hasta 20 años.
Además, en ciertos casos, los infractores pueden enfrentar otros tipos de responsabilidades:
El delito de robo se caracteriza por la apropiación indebida de bienes ajenos con el uso de fuerza sobre las cosas o la aplicación de violencia o intimidación contra personas. Es una acción ilegal que implica la sustracción de propiedad ajena con la intención de obtener un beneficio personal.
El hurto se define como la acción de apoderarse de bienes muebles de otra persona sin su consentimiento y con la intención de obtener un beneficio propio, sin recurrir a la violencia sobre las personas o las cosas.
Estos matices establecen la principal diferencia respecto al robo y, al mismo tiempo, determina la gravedad de las sanciones, por lo general, de una severidad menor.
Deben considerarse tres tipos de hurto:
La estafa se refiere a un delito en el que una persona engaña a otra con el fin de obtener un beneficio propio o causar un perjuicio económico. Implica el uso de artimañas, engaños o falsedades para inducir a error a la víctima y lograr que realice una acción que le cause pérdidas económicas.
Es un acto de engaño intencional que conlleva una violación de la confianza y puede tener diversas modalidades, como la falsificación de documentos, la manipulación de información o la simulación de situaciones falsas.
Un ejemplo muy claro de delito de estafa en Alcobendas ocurrió en 2019, cuando una persona se hizo pasar por un empleado de una compañía eléctrica. El acusado amenazaba con cortes en el suministro eléctrico a las víctimas, alegando que tenían deudas con la compañía. Este individuo fue arrestado y denunciado tras haber logrado estafas más de 12.000 euros en el momento de la detención sin descartar que puedan aparecer nuevas víctimas.
El fraude es un delito que implica el engaño o la manipulación con el propósito de obtener un beneficio ilícito o causar un perjuicio económico a otra persona o entidad. Entre sus tipos se encuentra el fraude financiero, que involucra la falsificación de información relacionada con transacciones monetarias para obtener ganancias indebidas.
La apropiación indebida es un delito que consiste en la apropiación ilegítima de bienes, dinero o recursos que han sido confiados a alguien en virtud de una relación de confianza, ya sea contractual o fiduciaria. Es decir, se da cuando una persona toma posesión de algo que no le pertenece, con la intención de obtener un beneficio propio y en contra de los intereses del legítimo propietario. Es un acto de deslealtad y abuso de confianza que puede tener diversas formas, como la malversación de fondos, el desvío de recursos o la apropiación indebida de bienes.
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar la experiencia de navegación, y ofrecer contenidos y publicidad de interés. Al continuar con la navegación entendemos que se acepta nuestra Política de cookies